Compré comida china anoche, al salir de la conferencia, y me senté a ver algo frente al televisor mientras Augusta y Octavia disfrutaban de sendos huesos en el jardín para que me dejaran cenar tranquilo (ya saben cómo son los perros, pueden sentarse a mirar impasibles mientras comes, con esos ojos de carnero degollado suspirando por algo que echarse a la boca). No he conseguido aún el capítulo 11 de The Killing y ya había visto el último de The Walkinng Dead, así que me aventuré con dos nuevos capítulos, el 2º y el 3º, de la serie Parenthood de la cual vi el episodio piloto en Las Palmas el fin de semana pasado. Me gustan las series de familia, lo reconozco, tipo Everwood, donde los personajes son gente normal con sus problemas normales del día a día. Esta serie está basada en la película del mismo nombre de 1990, y en aquella ocasión la familia tenía como patriarca a Steve Martin. Estoy bajando el resto de la 1ª Temporada porque casi casi me enganché. Ya les contaré.
Veamos que dice el blog "Asesino en serie":
La nueva 'Parenthood'
Es fácil ponerle pegas a ‘Parenthood’, la nueva serie de la NBC. Para empezar, es un remake, y eso le quita puntos necesariamente. Para continuar, dos de sus protagonistas estarán siempre ligados a trabajos anteriores. Peter Krause siempre será Nate Fisher, haga lo que haga. Nunca estará mejor que en 'A dos metros bajo tierra'. Y Lauren Graham (que sustituye a Maura Tierney, que, con el piloto ya rodado, se tuvo que retirar del rodaje por enfermedad) también será siempre otra persona: Lorelai Gilmore. Dos de los actores básicos en ‘Parenthood’ podríamos decir que chirrían un poco. Pero no vamos a hacerlo, yo al menos. Por ahora, no.
‘Parenthood’ es dramedia, aunque lo cierto es que tira mucho más hacia el drama. Parece que no será tan descorazonadora como 'A dos metros bejo tierra' (que era, digamos, dramón-edia), pero desde luego tampoco una comedieta familiar 100% bienintencionada, blanquísima y supercorrecta. No creo que vayamos a ver en ella los abismos sentimentales-sexuales de la sobradísima ‘Tell me you love me’, pero tampoco problemáticas descafeinadas del tipo ‘Médico de Familia’.
Su “versión” anterior, la película dirigida por Ron Howard hace 20 años (y titulada aquí 'Dulce hogar... a veces". Viva España), a juzgar por el piloto de la nueva, era más familiar, más redondita, más película y menos serie. Obviamente, pues era película y ésta es serie. Igual que ahora, su baza fundamental estaba en el reparto. En1990 eran Steve Martin, Diane Wiest, Tom Hulce, Martha Plimpton, Rick Moranis, Keanu y Joaquim Phoenix, antes de convertirse primero en alguien y luego en alguien zumbado. Ahora, además de a Krause y Graham, tenemos a Craig T. Nelson (papá Poltergeist), Bonnie Bedelia, Erika Christensen y Monica Potter. Es menos all-star-cast, pero da lo mismo. Los actores de la ‘Parenthood’ de NBC son buenísimos y, apoyados en el guión de un episodio piloto que los presenta muy bien, componen personajes muy interesantes, creíbles y empáticos. Un notable para el encargado de montar el reparto. Hasta los niños y los adolescentes son estupendos. Todos sabemos el daño que le puede hacer a una serie un actor/personaje infantil insoportable. Recordemos a la niña satánica de ‘Surviving Suburbia’, por ejemplo. En ‘Parenthood’, por ahora, esto no se da. Prueba superada.
Otra cosa es que nos apetezca entrar en otra familia llena de rarezas (es decir, en una familia corriente y moliente, como la tuya o la mía), que tengamos ganas de someternos nuevamente a un drama que posiblemente caiga en la sensiblería, el folletín o el vodevil. Esos riesgos siempre están ahí en este tipo de productos, y los que pensemos en seguir viendo ‘Parenthood’ tendremos que asumir esa posibilidad. Con un poco de suerte, dentro de unas semanas, Lorelai Gilmore y Nate Fisher se nos habrán olvidado un poco. En el peor de los casos, siempre podremos volver a los DVDs de ‘A dos metros bajo tierra’ y ‘Las chicas Gilmore’.
No hay comentarios:
Publicar un comentario