Noveleros somos y nos apuntamos anoche al concierto "Alternative Music Festival SOS" en la Plaza de la Música de Las Palmas de Gran Canaria. Yo, he de reconocerlo, no conocía a nadie, pero ahí estaban Bea, Gloria, Pacote y Pablo, mucho más al loro de la actualidad musical alternativa, para mostrarme la luz. Nuestra intención era escuchar, sobre todo, a Maika Makovski, y justo llegamos unos minutos antes de que ella empezara a cantar. Poca crítica musical haré porque no entiendo demasiado la llamada "música alternativa", pero sí diré que tiene una voz impresionante y que su grupo toca muy bien. No me entusiasmó, no, pero lo pasé bien; siempre es interesante conocer nuevas tendencias.
La nota majadera la pusieron un grupo de activistas pro-palestinos, según decían sus pancartas, que protestaban por haber entre los grupos uno de Israel, "The Apples", al que por cierto no llegamos a oír. Pues esta gente protestaba, con pancartas,. estrellas de david tachadas y otras lindezas, con el eslogan "Aplaudir a Israel es colaborar con el apartheid". De entrada lo que me apeteció (el corazón, no el cerebro) es preguntarles qué sabían ellos de la Historia de Israel, de Palestina, de las guerras, de la partición, etc., etc., etc. Si empezamos a boicotear los actos culturales negaremos que la cultura es unión, es paz. ¿Seguirán estos iluminados yendo a las inauguraciones de la Orquesta Filarmónica de Israel a boicotearlos, o a un concierto de Noa -que precisamente aboga por la paz entre palestinos e israelíes-, o del director Daniel Baremboim, o quizá del violinista Yehudi Menuhin?
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