Después del esperpéntico espectáculo que ha dado el ya ex jefazo del Poder Judicial español, Carlos Dívar, con sus viajes a lo largo y ancho de España y del extranjero, con acompañante o acompañanta, que lo mismo da, y de que el Gobierno no fuera capaz de dimitirlo sobre la marcha visto lo visto, hoy este fulano nos sale solicitando una pensión indemnizatoria en calidad de alto cargo. Ya ven, a este sinvergüenza, sin vergüenza alguna, no sólo no se esconde, desaparece, se muda a Qatar, a las islas Pitcairn o se hace la cirugía plástica, sino que con un par `pide más guita. ¿Dirá el Gobierno rápidamente algo al respecto? ¿apostamos?
▬
Dívar reclama pensión indemnizatoria en calidad de alto cargo
Si el Consejo lo acepta, el expresidente de,los jueces cobraría 8.670 euros mensuales, al margen de la pensión de jubilación.
José Yoldi Madrid 12 JUL 2012 - 22:13 CET
El que fuera presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, que tuvo que renunciar a su cargo por causa de indignidad, ha reclamado al pleno del Consejo la pensión indemnizatoria prevista para los altos cargos del Estado desde 1981.
El Boletín Oficial del Estado publicó el 30 de junio la dimisión de Dívar de todos sus cargos, pero cuatro días antes, el martes 26 de junio, este ya había presentado un escrito en el Consejo en el que solicitaba al pleno del citado órgano que le reconozca la pensión indemnizatoria prevista en la ley 74/80, que supone percibir mensualmente y durante dos años el 80% del sueldo que recibía.
Así, resulta que en caso de que el pleno del Consejo reconozca la pensión, Dívar cobrará aproximadamente 8.670 euros mensuales, al margen de su pensión de jubilación, que le corresponde por su condición de magistrado jubilado desde el 31 de diciembre pasado y que el interesado se encargó en enero de tramitar.
Lo que ocurre es que Dívar no ha dejado su cargo por enfermedad o alguna otra razón neutra, sino que se vio obligado a renunciar al mismo después de que los vocales se lo exigieran tras haber cargado al presupuesto del Consejo los gastos de desplazamiento, alojamiento, manutención y atenciones protocolarias a otras autoridades de 32 viajes de fin de semana de al menos cuatro días.
Dívar sostuvo que esos viajes eran oficiales y por motivos de servicio. Pero resultó que eran privados y en la mayoría de los casos de turismo y relax, como se demostró después de que todas sus coartadas fueran desmentidas, por diversas autoridades judiciales, municipales y autonómicas. Tal es el caso del expresidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, quien aseguró que nunca había invitado a Dívar, sino que este le había pedido entradas gratis para visitar la cueva de El Soplao.
No hay comentarios:
Publicar un comentario