Mi amigo Carlos, generoso sin límites conocidos, me invitó esta noche al concierto que la GLENN MILLER ORCHESTRA ofrecía en el auditorio de Santa Cruz de Tenerife. Un magnífico regalo de San José, realmente genial. La orquesta sonaba de maravilla, las y los cantantes (aquí los diferencio a propósito)estaban a la altura y las dos parejas de baile eran increíblemente buenas. Hasta llevaban su pequeño grupo de extras vestidos con uniformes militares de la 2ª Guerra Mundial que se mezclaba entre los asistentes antes de empezar y durante el descanso. Estos americanos saben mucho de shows, no cabe duda. Una noche estupenda para escuchar buena música de estos años que no volverán. ¡Gracias Carlitos!
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