Estuve este fin de semana en Gran Canaria, todo bien, sobre todo porque asistí el viernes a la ópera en el Teatro Pérez Galdós de Las Palmas. Una noche fresquita, perfecta para salir a la terraza del teatro entre el primero y el segundo acto, después de haber disfrutado de Juan Diego Fórez y la maravillosa aria de "Los Pescadores de Perlas" de Bizet, Je crios entendre enco. La ópera es preciosa, eso por descontado, pero la representación tenía sus más y sus menos. Criticar a los cantantes sería redículo por mi parte, pues no tengo suficiente cultura musical como para atreverme a hacer de crítico operístico, aunque he de reconocer que la puesta en escena no me entusiasmó, y ya se sabe que la ópera no es solo buenos cantantes, que por supuesto también, sino un compendio de muchas más cosas. Hubo exceso de bailes, siendo el grupo de bailarines un poco ridículo en su número, y los figurantes parecían envarados y tiesos. El decorado bien construido, digno aunque excesivamente predecible en su simetría. Ahora, a la ópera como al cine voy y si disfruto, pues ya está. Maravillosa música de Bizet, un Juan Diego Flórez estupendo y un buen elenco de cantantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario