lunes, 13 de agosto de 2012

EN ANAGA

Ansiosos por la primera ola
La Escuela de Fitenia inicia a los jóvenes chicharreros en la práctica del surf en playas como las de Los Roques, en Taganana, o el Porís de Abona, en el Sur.
NORA MARTÍN

Bajo las imponentes montañas de Anaga, en Los Roques, un grupo de jóvenes santacruceros disfruta estos días de verano del paisaje, el deporte y, sobre todo, las olas. La Escuela Oficial de surf de Fitenia aprovecha el espectacular enclave de la Playa del Roque de las Bodegas, en Taganana, para desarrollar una serie de cursos semanales en los que niños y jóvenes de entre 10 y 18 años adquieren sus primeras nociones de este deporte sobre la tabla. Se trata de un total de 16 chicos que, dirigidos por dos monitores, dan sus primeros pasos en esta práctica siempre de moda. A estos se suma un tercer grupo de la misma escuela que practica en la Playa del Porís de Abona, en Arico.
La jornada comienza con un calentamiento básico en la arena, seguido por un repaso en seco de las pautas más importantes a seguir por los principiantes una vez se suban a sus tablas. Tras esto, es el momento de lanzarse al agua y empezar a coger olas, mientras los monitores vigilan sus movimientos, les corrigen y aconsejan. Los monitores recalcan que estos primeros días son los más importantes, ya que es cuando van adquiriendo la seguridad que posteriormente les permitirá practicar solos.
"La primera vez que consiguen surfear y quedarse de pie sobre la tabla es espectacular. Se les queda una sonrisa en la cara que es imposible quitarte de la cabeza. Te da mucha satisfacción verlos así", comenta Eduardo Cabrera, uno de los monitores. Este joven tinerfeño comenzó su experiencia en estos cursos en 2006 desde el otro lado de la tabla, como un alumno más, para más tarde incorporarse al grupo de monitores. Ahora su hermano Enrique, de 12 años, asiste también a las clases como uno más de los niños y niñas tostados por el sol que recorren la orilla de la playa en constante movimiento.
Después del almuerzo y tras un breve descanso, el grupo retoma su actividad en el agua hasta las 16:00 horas, momento en el que empiezan a recoger y toman rumbo al centro de la capital en las furgonetas de la Escuela. "A pesar del cansancio, las rozaduras y de estar llenos de arena, nunca quieren salir del agua", afirma Carlos García, responsable y monitor de los cursos. "Aún así", reconoce, "nada más sentarse caen redondos".
Para muchos jóvenes chicharreros, los cursos semanales que la Escuela de Surf Fitenia desarrolla desde 2006 han supuesto su primera oportunidad de entrar en contacto con esta disciplina, aunque también hay repetidores, que aprovechan para perfeccionar su técnica y practicar junto a sus amigos. "Esta es la quinta semana que vengo y me encanta, porque poco a poco vas perfeccionando la técnica y disfrutando más", comenta Alessandro Rodríguez, que ya había participado en el curso en veranos anteriores.
El responsable de los cursos, Carlos García, afirma que "la mayoría de los chicos y chicas acaban encantados y una vez que tienen la confianza suficiente con la tabla no dudan en repetir, tanto con nosotros como por su cuenta".
Algunos de los alumnos que muestran mejores aptitudes para este deporte continúan entrenándose los fines de semana durante el resto del año -en tiempo en Tenerife lo permite- y se preparan para competir perfeccionando la técnica con los monitores de la escuela y con otros profesores expertos. Actualmente, la Escuela cuenta con un grupo de jóvenes y adultos que, en algunos casos, participa ya en competiciones a nivel regional y hasta internacional.
Entre estas futuras promesas destaca el caso de Laura Rodríguez. Con tan solo 12 años, esta joven comienza a domar las olas de manera que sólo los deportistas más experimentados logran hacer. "A mí me gustaría llegar a competir a nivel regional y nacional y que me patrocinara alguna marca famosa del sector. ¡Sería genial ser una surfista famosa!", afirma con mirada traviesa esta niña que acude a estos cursos desde que tenía seis años y que también aprovecha sus ratos libres para practicar con su hermano.
Al igual que Laura, algunos de los alumnos veteranos cuentan con su propio material, mientras los principiantes hacen uso del que les facilita la Escuela. "Se trata de tablas acreditadas como las mejores para el aprendizaje de esta disciplina, debido a sus dimensiones y seguridad, por asociaciones internacionales para el aprendizaje de esta disciplina por todo el mundo, como la asociación americana de escuelas de surf", señala Carlos García.
La Escuela de Surf Fitenia organiza estos cursos semanales todos los veranos en colaboración con la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento y la Federación Canaria de Surf, que la ha nombrado escuela oficial de la disciplina en la Isla. Además, el centro cuenta con el sello Islas Canarias Water Sport Experience, del Gobierno de Canarias, que la acredita como uno de los principales activos deportivos y humanos para las Islas en el desarrollo y fomento de las disciplinas náuticas, que tienen en el territorio canario un enclave muy provechoso.
Tras el último curso, que tendrá lugar la primera semana de septiembre, los talleres de verano tendrán su culminación en el campeonato sub-21 organizado también por Fitenia en la Playa de Taganana. Se trata de una competición puntuable para el circuito canario y nacional y a la que acuden deportistas de toda España. Será una ocasión en la que se darán cita los ídolos que muchos de estos jóvenes aprendices intentarán emular en los próximos años.
Sin embargo, los responsables de la Escuela de Surf de Fitenia no abogan por fomentar la competición entre sus alumnos, que ven en esta actividad la posibilidad de disfrutar de un verano diferente, activo y entre amigos. Carlos García resalta que lo importante de estos cursos "es que los niños que vengan se lo pasen bien, que haya seguridad y que estén controlados". De momento, Los Roques de Anaga seguirán disfrutando una semana más de las piruetas de estos pequeños surfistas.

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