Leyendo sobre las medidas que se pretenden tomas ante la falta de vivienda, por un lado el Gobierno, o sea al PSOE, y por otro las del PP, sólo se me ocurre pensar que a ellos, en el fondo, le importamos bastante poco.
O nada.
O una mierda.
O menos que nada.
Lo importante es el pulso eterno, el odio visceral, el vacío absoluto.
Una pena que sigan con el mismo rol, cada uno en contra del otro: y tú más, te llevo la contraria por inercia. ¿Es que hasta en el tema de la falta de vivienda no serán capaces de buscar un consenso por el bien de los ciudadanos?
Pues qué quieren que les diga, siendo nosotros los afectados y teniendo a estos como gobernantes, a estas mentes preclaras que tras todos estos años en huelga de brazos caídos han descubierto ahora que la vivienda vacacional es el anticristo, que de la burbuja inmobiliaria si te he visto no me acuerdo, que nos convertiremos finalmente en otra Singapur, los invitaría a todos ellos a un crucero, un barcazo de nombre "Bakunin" de lujo, eso sí, no vaya a ser que no se sientan como pez en el agua) y hundiría el barco, tal cual, como si de un serial de antaño se tratase.
Muerto el perro se acabó la rabia.
Me sentaría después a leer un buen libro y a mirar por la ventana para ver cómo crecen las plantas de mi pequeño jardín urbano.
Dios, qué asco les estoy cogiendo.
PD. En unas islas como éstas, con poco suelo urbano y mucho campo que proteger, ¿cuándo los políticos verán la luz y apostarán por una menor ocupación del territorio y pasarán a la edificación en altura y muchas zonas verdes, justo a la inversa de lo que se hace ahora? La tarea, tal vez, la tendrán los nuevos políticos pues los anteriores recuerden que siguen embarcados en el transatlántico.
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