Se terminan las vacaciones, se termina el relax. Se acabó eso de levantarse más tarde y sin despertador, el acostarse a las tantas después de terminar de ver una película... Llegan los horarios, el ring ring mañanero, el papeleo, el teléfono, las prisas, los agobios, las malas caras. El miércoles me reincorporo a mis labores ayuntamentiles y dejo el estudio por las mañanas, otra vez. ¿Qué queda? Pues intentar hacer bien mi trabajo, aprovechar las tardes e intentar seguir adelante hasta las siguientes vacaciones. Los días poco ayudan, grises, húmedos y con la noche que cae a las 6:30 de la tarde (¡quién habrá inventado este dichoso horario de invierno!).
Por otro lado, se acercan los Carnavales, ¿ven? Si es que el que no se consuela es porque no quiere.
Me invitan mañana a uno de los conciertos del Festival de Música de Canarias, este año la edición nº26. Zubin Mehta dirige a la Staatskapelle Desden con obras de Brahms. El programa es estupendo: Obertura Trágica, Variaciones Haydn y Sinfonía nº4. Será una buena forma de despedir las vacaciones.
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