EL PAÍS, edición online, 02.04.13
No entiendo de política internacional y supongo que esta no debe ser precisamente fácil, pero no creo que haya que ser un lince para darse cuenta de la chapuza del Gobierno con el dictador Obiang. ¿Que no quieres que se repita una imagen tan lamentable como las de ciertos Presidentes saludando a Gadafi unos meses antes de la Primavera Árabe? ¿que Obiang es un tipo incómodo? No creo que la solución sea invitarlo a cenar y después no aparecer o dejar que se plante en el funeral de Suárez y después censurar los saludos a los políticos o a los Reyes.
De pena.
PD. Tampoco creo que se pierda demasiado este fulano; ¿se imaginan lo aburrida que puede ser una cena sentado junto a Rajoy I "el pandereta"?
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