miércoles, 6 de marzo de 2013

ALGO HUELE A PODRIDO EN ESPAÑA

¿Qué nos pasa? Repito, ¿qué nos pasa?
Un país como el nuestro, con tanta Historia y tanta cultura a nuestras espaldas, donde durante mucho tiempo no se ponía el sol... ¿cómo hemos llegado hasta hoy?
¿Cómo es posible que ver a un grupo de famosillos en bañador pueda acaparar una enorme audiencia? (el dichoso morbo de ver a alguien diferente haciendo el ridículo más grande). ¿Cómo es posible que la número 2 del Partido Popular salga a hacer unas declaraciones sobre Bárcenas, se ría de nosotros y siga tan campante?´¿Cómo es posible que el propio Bárcenas, después de todo lo que ha pasado y está pasando, siga danzando por España y por el extranjero, como si nada, y se permita denunciar al PP cada día por una cosa distinta y no ocurra nada? ¿Cómo es posible que veamos casi a diario a alcaldes de pueblo, concejales de medio pelo y hasta arquitectos municipales esposados mientras se investigan los numerosísimos casos de corrupción y a tipos como Urdangárín, Fabra o el propio Bárcenas se les siga dando largas sine die y a ninguno lo metan en el trullo? ¿Se imaginan a un tipo guapo, encorbatado, en la portada del ¡HOLA!, hablando maravillas de la reina Sofía para el regocijo del personal? (a la inefable Corinna ya la hemos visto tal cual, no sólo en el ¡HOLA! sino en el diario EL MUNDO; increíble pero cierto, la supuesta amante del rey dando ruedas de prensa para loar al monarca y decir, de camino, que ha hecho "trabajitos" secretos y comprometidos en España).
Pasan los meses, la corrupción está ya en el segundo puesto de nuestra preocupación como españolitos, y los políticos siguen sin dar ejemplo, no dimite nadie, no se cesa a nadie y venga a reírse de nosotros. Me viene a la cabeza un chiste gráfico buenísimo donde se veía una rueda de prensa de la vicepresidenta Soraya ante un grupo de periodistas. Uno de ellos, con la mano levantada, le preguntaba algo así como "cuando no les vemos, ¿se ríen de nosotros?". Lo malo es que ya lo hacen directamente en nuestra cara, sin cortarse un pelo. Las declaraciones de Ana Mato sobre las actividades de "ese señor" (su ex marido hasta hace dos telediarios) o de Cospedal y sus "en diferido" pasarán a la historia de los esperpentos españoles.
¿Cómo hemos podido llegar a esto? Avergonzado estoy, palabrita.

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