Los catalanes se equivocan y, si no, tiempo al tiempo.
A los suecos, finlandeses, noruegos o daneses, por poner un ejemplo, nadie tiene que decirles por ley que deben aprender inglés, es pura supervivencia/ inteligencia. Sus respectivos idiomas únicamente los hablan ellos mismos, nadie más. Comunicarse ha sido siempre una manera innata del desarrollo de los pueblos. Si antes fue "renovarse o morir", también podemos hablar de "comunicarse o morir". La Humanidad tiende a unirse no a lo contrario; ya lo dijo Miterrand, "el nacionalismo es la guerra", allá por el año 1995.
Cataluña tiene una oportunidad de oro de no cerrarse al resto por un nacionalismo mal entendido. Tienen la suerte de hablar dos idiomas, español y catalán, ¡qué mejor que ello! Los políticos de barretina, que hubiera dicho mi socio muerto, han impulsado este ombliguismo que vemos hoy, aislados del resto del país de manera voluntaria y obligada (el que no es independentista se tiene que callar), hasta llegar al corre corre aprobando leyes para el catalán vehicular -bien les gusta a los periodistas poner de moda palabras rebuscadas-. No lo entiendo, la verdad ¿o sí?
Europeos, modernos, visionarios... siempre se ha dicho de ellos. ¿Pero de verdad reniegan del castellano? Parece que sí, qué pena, renunciar conscientemente a una parte de su cultura, inconcebible. Ya me hubiese gustado tener dos lenguas maternas.
¡Aguañac!
♫
Serrat, *Plany al Mar.
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