Las bandas sonoras de Ennio Morricone son tan buenas, todas, que no tendría tiempo para hablar de ellas, así que únicamente lo haré con estas dos como ejemplo, las de las películas "El bueno, el feo y el malo" o "Los intocables de Eliot Ness", ambas pertenecientes a la música e mi época de estudiante donde las escuchaba en un radio-cassette de la época, que cuidaba como oro en paño. Aquellas cintas, ya desaparecidas, donde em entretenía en pintar cada canto con una carátula a la altura de la música, formaron parte de la decoración de mis cuartos de estudiantes en mi época universitaria, tanto que cuando oigo una de estas melodía me transportan a los años que ya no volverán. DEP.
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