Daniel Barenboim no sólo pasará a la Historia por ser uno de los mejores directores de orquesta que ha habido sino por promover la paz entre árabes y judíos. Tiene triple nacionalidad: argentino (de nacimiento), español e israelí. Además ha fundado una orquesta con músicos judíos y árabes, iniciativa alabada en todo el mundo. Por esto, entre otras cosas, es tan importante su voz por la paz, como también la de la cantante israelí Ajinoam Nini (Noa). La actitud de la Ministra de Cultura es sólo el fiel reflejo de su Primer Ministro Betanyahu, un recalcitrante belicista que no hace sino demostrar que la excepción confirma la regla, como lo ha sido Trump en USA; la democracia y sólo la democracia permite hechos como éste, muy a nuestro pesar. Parece que el mundo ni ha aprendido ni aprehendido nada de las enseñanzas de Gandhi y su no violencia. Aún así debemos ser optimistas, la paz está (debe estar) cerca.
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