Ni de política, ni de fútbol, ni de toros se habla, decían antes.
De toros ya no habla nadie, menos mal; de política y de fútbol todo el mundo.
Las noticias que giran alrededor de la posible amnistía son, como mínimo, preocupantes por la falta de ética respecto a las reglas del juego. Lo que no se gana en las urnas se intenta en la calle.
Las hemerotecas nos recuerdan la Historia, aunque nadie las tenga en cuenta porque entonces saldrían a la calle avergonzados. Ahora, que sean los sujetos estos de la iglesia católica -príncipes, se hacen llamar-, los que salgan dando clases de moralidad es para... no lo escribiré.
Que todos ellos, políticos de VOX y del PP, Esperanza Aguirre incluided -toda una expresidenta de Madrid-, salgan a la calle por la supuesta amnistía, jaleados por un grupo de jueces, "jueces", que se pronuncian en contra de una idea que no se ha materializado en ley o decreto alguno, es absolutamente inexplicable; me atrevería a decir, además, que no tiene parangón.
¿Dónde están las manifestaciones de toda esta gente de bien, temerosos de dios todos (y todas), pidiendo responsabilidades a los delincuentes, violadores, pederastas y demás curas varios?
¿Cómo es posible que tengamos tan mala memoria?
Miedo me da por lo que se está pereciendo esto a las postrimerías de la 2ª República española.
1 comentario:
Más claro no se puede decir…
Publicar un comentario