Soy consciente que en una época los arquitectos han ganado mucho dinero, y más si cabe en zonas como ésta donde el desarrollismo turístico fue impresionante a partir de los años 70. Por supuesto no tomaré esta época como ejemplo profesional porque todos sabemos, y vemos, cómo están nuestras islas hoy, cuando el boom turístico-constructivo e inconsciente ha dado lugar a que se escuchen voces críticas con el modelo imperante hasta ahora. ¿Pero qué ha sido de la profesión de arquitecto? ¿qué ha sido del profesional del que se fiaban los promotores, ya sean privados o públicos? ¿qué ha sido del profesional al que dejaban libertad para distribuir el espacio de la manera más práctica, estética y bella posible? Como en todo en esta vida el dinero es el que manda, no el buen gusto, no el sentido común, no. Poderoso caballero ya dijo Quevedo...
Desde luego si volviese a nacer no sería arquitecto. No.
No hay comentarios:
Publicar un comentario