TENERIPUR, SINGARIFE, ¿CUÁL TE GUSTA MÁS?

"Yo he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. He visto el despertar de una isla atlántica con charcos naturales y Cymodeas Nodosas. Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia".

¿Qué queremos dejarle a nuestros hijos? ¿cómo y dónde queremos vivir los que ya vislumbramos la línea de META? Los periódicos del régimen están ya erre que erre con el bombardeo diarios acerca del caos del Puerto de Los Cristianos (caos de tráfico que existe, sin duda) y la conveniencia de un nuevo puerto, un macropuerto en Fonsalía, Guía de Isora, al Oeste de la isla de Tenerife. Como no era suficiente con el Puerto de Santa Cruz consiguieron construir el Puerto de Granadilla, en aquella zona sureña de la isla donde las algas arañaban las piernas de los políticos y de las políticas. A este macropuerto, absolutamente infrautilizado como lo es del Puerto de Agaete en Gran Canaria, le sumamos el de Los Cristianos, base de los muy cómodos viajes marítimos a La Gomera pero que suponen un infierno para el tráfico que entra o sale de él, problema al que nunca han querido encontrar una solución lógica. Claro que, a lo que nos tienen acostumbrados los políticos patrios chicos, es a matar moscas con cañones. ¿Que el Puerto de Santa Cruz se muere, pues nada, ¿para qué revitalizarlo? Hagamos otro nuevo. ¿El aeropuerto del Norte tiene mala prensa? Pues nada, otro flamante aeropuerto en el sur, y líbrenos dios de que en el aeropuerto de Gran Canaria construyan una nueva pista en él... ¡es la guerra! En Los Cristianos resolvemos los viajes a la Gomera con el discreto puerto existente, al que dejamos que se colapse sin crear nuevas infraestructuras para poder llegar a clamar al cielo, ¡Fonsalía es la solución, alabado sea! Y mientras, entre Fonsalía SÍ (los que quieren a Tenerife), Fonsalía NO (los verdes de siempre), aprovechamos para meterle mano a los charcos y llenar la naturaleza que nos queda de plataformas, soláriums y aparcamientos para que el turismo sigo haciendo caja. Y eso que se deben haber olvidado aquí de la megabandera de ¡¡E s p a ñ a!! que el inefable ministro Soria (sí, el del impuesto al sol) plantó en la Fuente Luminosa de Las Palmas. Mejor ma callo.

De esta manera, granito a granito, Tenerife va dejando de ser lo que fue -no me atrevo a decir lo que es- y se convierte en una suerte de Singapur o de Hong Kong guanche, con algo menos de chinos . Yo, para empezar, prohibiría la película Blade Runner no sea que vayan a tomar ejemplo de la ciudad, que ya uno no está viejuno y no se fía de nada. 

Como le comentaba a mis amigos ayer, conociendo a Coalición Canaria y su incondicional y demostradísimo amor por ¡¡T e n e r i f e!! (porquesomosdeaquí), yo me plantearía declarar la isla ciudad-estado y que nos envidien los catalanes, porque con tanto aeropuerto y puerto, una gasificadora y una central nuclear, para las que ya encontraremos un lugar emblemático idóneo para instalarlas, la virgen de Candelaria, la Fufa, el Tere, el Padre Teide (demipropiomundoelrey) y el turismo redentor, ¿qué más necesitamos?

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Soul Sanet, *Llámame por mi nombre.