Tengo una tradición tonta, sí, pero ¿a quién le importa realmente? Supongo que a nadie, para qué nos vamos a engañar. Hace ya casi diez años estrenaron "Love Actually", una comedia pasteloso-navideña que me gusta, donde las historias se entremezclan y casi casi todos los personajes terminan felices y comiendo perdices, película que veo en mi casa cada Navidad. Primero fue en Pin y Pon, ahora en Villa Augusta también. ¿Lo mejor? Collin Firth hablando portugués con su asistenta.
¿Se puede pedir más para una fría noche casera de lunes? Tengo un poco de arroz tres delicias que sobró de la cena del sábado en la nevera que cenaré con un trozo de pastel de jamón que me agencié esta mañana; una manta escocesa sobre las piernas, el radiador encendido y mis perritas en el sillón para caldear un poco más el salón. ¡Estoy de vacaciones!
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