jueves, 20 de enero de 2011

¿TÚ QUÉ VOTAS?

¿Has votado en la encuenta de El País sobre los traductores del catalán, vasco, gallego y valenciano en el Senado. Parece ridículo poner en el Senado español un traductor entre personas que hablan con fluidez el mismo idioma, el idioma de su país. Luego no hay dinero para subir las Pensiones, ni para mantener el nivel adquisitivo de los funcionarios, ni para las ayudas a dependientes, la culpa de todo la tienen los controladores, etc. Traducir, ralentizará la actuación del Senado, o sea más sesiones igual a mas dietas. (¿Y, de camino, nadie se ha planteado realmente si el Senado sirve para algo?).

PARTICIPA EN UNA ENCUESTA LINGÜíSTICA DEL DIARIO "EL PAÍS", Y... vota lo que te dé la gana, como no podría ser de otra manera. Solo se puede votar una vez por persona.
La verdad es que cuando escucho a algún político hablando en su lengua en Radio Nacional, y hay que traducirlo al español pienso: pero si lo que quieren es que todo el mundo se entere de sus declaraciones ¿no sería más sencillo hacerlo en español? Soy canario, soy español, soy europeo... pero no soy nacionalista ni lo más mínimo. Me parece maravilloso que nuestro país tenga varios idiomas porque, sin duda alguna, se enriquece, pero ¿por qué hay que renegar del idioma común? Yo digo papa, por supuesto, pero si viajo a Madrid pido patatas y me quedo tan feliz, pues sé que así me van a entender más fácilmente. He ahí la riqueza.
¿Recuerdan la canción "Let's Call the Whole Thing Off" de George Gershwin? Me acordé de ella ahora.
¿Qué habrá sido de aquella idea de que el esperanto fuera el idioma universal? Tanto tiempo pasado para que los pueblos nos unamos y venga los nacionalismos a dar el coñazo con la diversidad mla entendida.
¿Seguimos hablando de riqueza? Un ejemplo, María del Mar Bonet, una estupenda cantante mallorquina que canta en catalán.
***
María del Mar Bonet, *L'águila negra.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

la estupidez no tiene límites.

MUNDO CRETINO dijo...

Estoy de acuerdo, la humanidad tiende a unirse y los nacionalismos vernga a dar el coñazo.