CRÓNICA AUSTRAL (IV)

ANIMALES Y NATURALEZA

Además de pasear por Sídney, del pequeño crucero por la bahía y de la arquitectura de la ciudad, decidimos conocer las "Blue Mountains" y el FETHERDALE SYDNEY WILDLIFE PARK, la forma más fácil de ver fauna lugareña. Sólo con estar cerca de los koalas, los wombats y los canguros ya está justificado ir a Australia, créanme, si bien vimos también dingos, demonios de Tasmania y varios animales más. Los canguros pequeños son simpáticos, se dejan tocar sin problema y les puedes dar comida que previamente te han vendido, unos vasitos con una especie de pienso. Ahora, los canguros grandes, enormes, dan más respeto cuando estás junto a ellos. Los koalas son preciosos y parece que se mueven a cámara lenta. 

Tras visitar esta reserva de vida salvaje nos encaminamos a las Montañas Azules (Blue Mountains), donde pasamos algunas horas recorriendo el pueblo de Leura y la zona montañosa a pie, en teleférico, skyway y tren panorámico, volviendo a Sídney en barco. La región montañosa está compuesta por una meseta de arenisca, hendida por una garganta de hasta 760m de profundidad. El punto más alto es el Monte Werong con 1.215m. Una gran parte de las Montañas Azules forma parte del Entorno de Patrimonio Histórico de la Gran Área de las Montañas Azules, que consta de ocho parques nacionales y una zona de conservación.