sábado, 9 de junio de 2012

BREAKING BAD

Comencé a seguir la serie Breaking Bad hace ya tiempo y se la pasé a Pablo; él se enganchó y yo no. Ignoro la razón, quizá fuera muy sórdida, me aburrí, no lo recuerdo. El caso es que me he decidido a volver a verla por lo que empezaré por la segunda temporada... Creo que la primera la vi completa. Voy a hacer un poco de bicicleta elíptica y así hago tiempo para que se baje el primer capítulo. Veamos qué dice de la serie el blog "El club de los imposibles":


Breaking Bad, droga a fuego lento
Redactado y publicado por Andrew Zimmerman el Miércoles, 30 mayo 2012
 
Con las series de televisión hay que tener paciencia, igual que con algunos libros. Muchas no seducen a la primera, pero cierta perseverancia asegura suculentos frutos. Breaking Bad pertenece a esta clase de serie que debemos dejar crecer para disfrutarla en plenitud.
Lo que en sus dos primeras temporadas parece una surrealista e inverosímil aventura de un profesor chiflado y su no menos trastornado alumno, acaba siendo, en sus dos siguientes sesiones, una fascinante ficción sobre el narcotráfico sureño, cruel, seco, chapucero y letal.
Debe algo la estética Breaking Bad a Dexter, ambas soleadas y latinas pero profundamente perturbadoras si se lo proponen. El empeño por el detalle, las referencias químicas, los contínuos flashfoward y flashback antesala de cada episodio, el humor negro, lo grotesco, son características muy particulares, arduamente trabajadas, de un serial con una extrañísima personalidad.
Vince Gilligan, padre creativo y director de los episodios más trascendentes de cada temporada, ha parido una criatura tan deslumbrante como bizarra, una rareza con algunas de las escenas más retorcidas que he visto en pantalla. Imposible que las andanzas de los primos gemelos de Tuco o el sucio devenir de Jesse Pinkman dejen al espectador indiferente.
Conforme se enreda y su personalidad muta en un traficante sin escrúpulos, la aventura de Walter White absorbe y engancha, y promete para su quinta y última temporada, un tremendo desenlace. ¿Te lo vas a perder?

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