¿Conocen esa sensación de tener en la cabeza un lío de ideas y no saber cómo ordenarlas? La sensación es como la de tener todas las piezas de un gran puzzle sobre la mesa, todas de color blanco, imposible de colocar, ya seas un cobarde o el mayor valiente de los hombres. Una noticia que no te gusta, lo que ves, lo que escuchas; el cerebro te da unas órdenes concretas, el corazón las contrarias. ¿Tendremos todos un Dr. Livingstone dentro? Me temo que no, si no sería todo mucho más fácil. Ser un aventurero de la vida, sin tener que descubrir el nacimiento del Nilo, sólo debe estar programado para algunos afortunados. Nuestro vídeo-juego vital tiene un problema, que cuando caes o pierdes la partida no es posible volver al principio, aunque... pensándolo bien, ¿y por qué no? ¿Y si aquí estuviera el quid de la cuestión? Volver a empezar, romper lazos, quemar las naves, destruir los puentes, en definitiva vivir. Nos quedan dos telediarios, lo sabemos, ¿por qué no disfrutar los años que quedan conscientes de ser felices?
Cuánto daría yo porque alguien me dijera ¿el Dr. Livingstone, supongo?
Bakermat ft. Alex Clare, *Living.
No hay comentarios:
Publicar un comentario