Siempre celebrábamos la Nochebuena cenando en casa de mis abuelos, siempre. Cada año, antes de sentarnos, mi abuela repetía ¿ya le han sacado una foto a la mesa que está tan bonita? Cada año se le sacaba una foto a la susodicha, fotos que jamás vi, dicho sea de paso. Ahora mis abuelos ya no están, somos menos alrededor de la mesa, pero la tradición de la foto a la mesa bonita persiste, recordando en ese momento a mi abuela y su recurrente pregunta. Yo tomé mi propia foto y este año sí que hay una para mostrar. El postre -este año tarta de queso con chocolate- da por finalizada la cena antes de la conversación de sobremesa.
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