Se acercan inexorablemente las Navidades, como cada año, estemos en crisis o en época de vacas gordas (¡quién las recuerda ya!). Los grandes almacenes nos lo recuerdan allá donde vayamos por si lo hemos olvidado de alguna manera.
Estas fiestas, este año, tienen que ser especiales, diferentes. ¿Por qué? pues no dicen ¿si quieres café toma dos tazas? pues por eso; ¿la crisis nos amarga la vida? pues seamos felices doblemente. Ni los políticos, ni los jefes, ni el trabajo, ni los bancos ni los periódicos ni la tele nos van a amargar estas fiestas. Y sí, claro, pasarlas en Nueva York sería genial.
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