LIBROS

http://www.comunicacion-cultural.com/2011/10/24/dia-de-la-biblioteca/
Dicen que todos los días hay algo que celebrar. Ayer, 24 de octubre de 2011, también; fue el Día de la Biblioteca.

Patrocinado por el Ministerio de Cultura a través de la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas, este día surge en el año 1997 y lo que pretende es difundir la existencia de un servicio público de proximidad al ciudadano que contribuye de manera eficaz a facilitar el acceso al conocimiento a todos los ciudadanos. Sus principales objetivos son, entre otros, conseguir que los medios de comunicación divulguen la función que realizan las bibliotecas, sus actividades y su colaboración con otros sectores tanto públicos como privados. Rendir un homenaje a todos l@s bibliotecari@s del país, en reconocimiento a su esfuerzo, dedicación y motivación a la lectura. Como es lógico, otro de sus objetivos es fomentar actividades de creatividad, información, conocimiento y promoción de la lectura, impulsar proyectos en las bibliotecas para que estas sean centros de aprendizaje permanente, con la ayuda de lo existente y las nuevas tecnologías además de asesorar a padres, madres y a mediadores/as en la difícil tarea de seleccionar libros infantiles y juveniles de calidad.

Por eso desde el equipo Dosdoce os animamos a que os acerquéis hoy a visitar la biblioteca que os pille más a mano, pues debemos ser conscientes de que estas instituciones son más necesarias que nunca para garantizar que los intereses públicos de la futura sociedad digital estén por encima de los intereses comerciales y económicos del sector privado, por muy legítimos que sean.

La web social, más conocida como Web 2.0, es uno de fenómenos sociales que más está transformando el papel de las bibliotecas en los últimos años. A través de sus herramientas – blogs, wikis, podcasts, vídeos, redes sociales – se ha desarrollado un conjunto de nuevos comportamientos y expectativas en la sociedad civil que las bibliotecas deben conocer y atender. Estas nuevas herramientas permiten a los ciudadanos tener un mayor protagonismo en la planificación y desarrollo de los contenidos de una biblioteca (programación, compra de materiales, etc.), así como en la definición de sus servicios. La incorporación de las nuevas tecnologías sociales en las bibliotecas desarrollará una serie de habilidades y cualidades humanas como el intercambio de conocimientos entre bibliotecarios y usuarios, compartir la autoría en la creación de ideas, dialogar y argumentar diferentes puntos de vista, etc. Si realmente queremos crear una nueva forma de hacer biblioteca, atraer a los usuarios digitales y responder a sus necesidades, deberemos incorporar estos nuevos valores en las mismas.