Si no hubiera series de televisión en mi casa no habría televisor; bueno, sí, no he de olvidar que los DVD de ópera me gustan también. Pues bien, como iba diciendo, la televisión en general es un horror -siempre hay excepciones, claro está- pero al no verla siempre pagan justos por pecadores y me pierdo lo `poco interesante que hay. Vale, pero volvamos al meollo, a las series. Me gustan, me entretienen, me enganchan. No todas, al contrario, pocas, pero las que lo consiguen me convierten en fiel seguidor. Ya nos anunciaron que vuelve la 2ª temporada de "The Walking Dead", y espero con ansia las nuevas de "Glee", "Games of Thrones", "Moder Family" y hasta la 2ª de "Falling Skyes", un bodrio muy entretenido. Ahora sigo "Misfits" y otras series a las que estuve enganchado han sido "El ala oeste", "Everwood", "Queer as folk", "24" o la primera temporada de "Prision break"... Ya les comenté que terminé de ver "Boston Legal", hasta ahora la mejor serie que he visto nunca (con perdón de "Friends"), y ahora mis amigos me tientan con "The Wire" y "The Killing". Por cierto, nunca vi "Los Soprano"; ésta la tengo que apuntar.
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Cuando se anunció que que ‘Rubicon‘ no iba a a ser renovada para una segunda temporada por AMC, entre las razones que se esgrimieron para explicar esa decisión figuraba no sólo el gran éxito de ‘The Walking Dead‘, sino también el próximo estreno de ‘The Killing’, una serie cuyo piloto se ordenó al mismo tiempo que el de la adaptación del cómic de Robert Kirkman, y de la que la cadena pidió una temporada completa este verano.
‘The Killing’ es un una nueva versión de ‘Forbrydelsen‘, un thriller danés de gran éxito que sigue la investigación del asesinato de una joven desde el punto de vista de los policías, la familia de la víctima y los sospechosos. Los responsables de la serie, que tendrá una primera temporada de 13 capítulos, son Mikkael Bondesen (‘Burn notice’) y Veena Sud (’Caso abierto‘), y entre sus protagonistas figuran Michelle Forbes, Billy Campbell y Mireille Enos. AMC, además, ha empezado ya a anunciarla dentro de promociones genéricas con sus series de más éxito. No se ve mucho de ella, más que la fotografía fría un poco estilo ‘El silencio de los corderos‘.
Este acercamiento a un crimen desde varios puntos de vista no es nuevo. La miniserie británica ‘Five days‘ mostraba la investigación de una desaparición siguiendo a los detectives, la familia, los sospechosos y los periodistas que cubren la noticia, y tener tantos puntos de vista diferentes puede aportar cosas muy interesantes, o resultar un poco lío si no se maneja bien. El estreno de ‘The Killing’ está programado para el año que viene, sin que se sepa exactamente cuándo, y lo cierto es que, viendo esas escasas imágenes de la promo, me ha venido a la mente otra recomendable serie, la canadiense ‘Durham County‘, que también se centraba en la muerte de una joven y tenía una atmósfera malsana y fría.
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¿Tú de qué serie eres? ¿De ‘Los Soprano‘ o ‘The Wire‘? Esas dos son las que se van turnando en el puesto más alto de todas las listas que se hacen periódicamente sobre las mejores series de televisión (estaban incluidas en nuestra lista particular también), y que una u otra sea la número uno acaba dependiendo un poco del gusto personal del que elabora la clasificación en cuestión (a veces, pocas, ceden su puesto a ‘A dos metros bajo tierra‘ o ‘El ala oeste de la Casa Blanca‘). También es algo que, curiosamente, depende un poco del país donde se haga la lista. En Estados Unidos, se van turnando; en el Reino Unido hay verdadera devoción por ‘The Wire’, mientras en España nos quedamos más con ‘Los Soprano’.
Quizás eso se deba a que los mafiosos de David Chase se vieron en su momento por Canal+ y sus temporadas se han ido editando en DVD con asiduidad. ‘The Wire’ no llegó a España, a la parrilla de TNT, hasta 2008, el año en el que terminaba, y su quinta y última temporada ha tardado bastante en estar disponible en DVD. Pero ahora que ya lo está (y aunque las ediciones no son precisamente baratas), se acabaron las excusas para no acercarse al mundo de los camellos, los profesores, los estibadores, los periodistas, los niños y los policías de Baltimore, un mundo que más de una vez ha sido comparado con una novela rusa o con grandes novelistas del siglo XIX como Balzac o Dickens, y que David Simon creó basándose en su experiencia como reportero de sucesos del diario Baltimore Sun.
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